miércoles, 29 de febrero de 2012

4. A month since i saw you standing

Tan solo quedaban un par de horas. Celia y yo mirábamos los carteles del aeropuerto, no encontrábamos el vuelo que nos llevaría a Madrid, a casa. Mientras buscaba, mi mente no dejaba de volver hacia atrás, hacia esas pequeñas vacaciones que me habían cambiado la vida por completo. El día que recibí la llamada de Zayn todavía no estaba totalmente segura de mi elección, anteriormente había consultado a mis padres y amigos y todos habían coincidido en que era una gran oportunidad que no debería dejar correr.  Zayn divertido me explicó todo lo que conllevaba aquello y me dijo que él nunca se había arrepentido de lo que había hecho. Para finalizar, me convenció diciéndome que nunca me podrían rechazar en el concurso ya que, anteriormente habían cogido a gente con mucho menos talento que yo.
Tuve que aceptar, no podía decir que no a esos chicos, de momento. Los siguientes días pasaron demasiado deprisa para mí, todos los días venían a nuestro apartamento y cada día me enseñaban a cómo controlar mi voz. Louis, Liam, Harry y Zayn se habían convertido en personas muy importantes para mí, era un alivio que me prometiesen venir a España para seguir con los ensayos, y sabía que lo harían, confiaba en ellos. Con Louis siempre tenía puesta una sonrisa en la cara, con Harry tenía abrazo asegurado todos los días, con Liam siempre me encontraba segura y con Zayn me podía tirar horas hablando sobre gustos musicales. En cuanto a Niall…, Niall para mí no era ni guapo ni feo, ni amable ni borde, era tan solo él. Cada vez que llamaban al timbre un extraño hormigueo aparecía en mi tripa, no era para nada desagradable, nunca había sentido tal cosa. Mi mente dibujaba constantemente su rostro en mis comidas y en mis sueños. Me llevaba bien con él y siempre era él el que me corregía, me gustaba cuando lo hacía. Admitía que esos ojos azules me volvían loca pero, ¿mi locura hacia él iba más allá que sus ojos?, esa pregunta me martilleaba todos los días, a todas horas pero siempre me respondía de la misma manera: No, si nunca te has enamorado ¿por qué ibas hacerlo ahora?

Niall’s point of view:
Estaba Sentado en el avión que nos llevaría de vuelta a Londres. Esa semana había sido estupenda, habíamos realizado nuestro último concierto en Belfast y ahora tendríamos unos meses de descanso.
Esa semana había estado cargada de emociones para mí, nuestro último concierto había resultado ser todo un éxito, salíamos en periódicos y telediarios irlandeses y, por otro lado, estaba el tema de la chica española. Noelia había mejorado rápidamente, ahora controlaba muchísimo mejor los agudos y graves (su gran debilidad). Tenía claro que la iba a echar mucho de menos el tiempo que estuviésemos en Londres, la sonrisa que me regalaba cada vez que la corregía, sus manos cálidas que m estrujaban los dedos cada vez que su respiración no alcanzaba alguna nota, la manera en que nos recibía todos los días divertida con rock americano a todo volumen. Sí, lo iba a echar mucho de menos.
-Niall- me llamó Louis sentándose de un salto en el asiento de al lado.
-Hola Louis- le sonreí.
-Mira- me señaló a nuestros amigos para que viera que estaban todos completamente dormidos. Reí.- Quería aprovechar este momento para hablar, tu y yo.
-¿qué tramas?- le pregunté, eso no pintaba nada bien.
-Nada, solo quiero hablar. ¿Qué tal esta semana?
-Bien. Es increíble que hayamos salido en la prensa y televisión ¿no crees?
-Sí, es estupendo. ¿Y qué me dices de la chica, Noelia?- dijo Louis. No me gustaba por el camino que estaba llevando la conversación.
-Pues que tenemos que ayudarla. Tiene una gran voz. Pienso que puede llegar a ser una gran estrella del pop.
-Sí, eso ya lo sabemos todos. No me refería a eso… es guapa verdad?
-Louis… te conozco. ¿A dónde quieres llegar?
-Niall, yo también te conozco a ti y nunca te he visto mirar a nadie como la miras a ella. La miras…, la miras como yo miro a Eleanor cada vez que la veo por primera vez en mucho tiempo además, la tratas tímida y cariñosamente, ¿no es verdad? Puede que no esté en lo cierto por eso quería hablar contigo…
Mi respuesta fue el silencio.
-Entiendo amigo- dijo Louis levantándose y dándome una palmada en el hombro- No te rindas, ella te mira de la misma manera.

Noelia’s point of view:
Sentada en mi silla mi mente volaba entre pensamiento mientras la aburrida profesora de historia nos deleitaba con una de sus maravillosas explicaciones sobre Isabel II y sus regentes Espartero y María Cristina. Ya había pasado un mes desde nuestro viaje a Belfast y todavía no había recibido ni una sola llamada de los chicos. Me había hecho tantas ilusiones con el tema que me negaba a abandonar la idea pero, ya empezaba a pensar que se habían olvidado de mi o que se habían cansado y no vendrían. No podía juzgarles, no estaban obligados a hacerlo. Lo que más me frustraba era que cada noche de esos 30 das había soñado con Niall y como no lo viese pronto esos sueños seguirían repitiéndose cada noche.
Unos golpes en la puerta me sacaron de mis pensamientos. El jefe de estudios apareció detrás de la puerta. Una sonrisa se dibujó en mi cara. Detrás del jefe de estudios podía ver a Harry bailar moviendo las caderas y los brazos, Zayn sacaba la lengua mientras movía la cabeza de un lado a otro como un paranoico y me saludaba con su mano derecha, y Louis daba pequeños saltos de alegría mientras me buscaba entre toda la gente de mi clase. Era la mejor sorpresa que me podían haber dado.
Toda la clase empezó a hablar y gritar, incluso una chica se levantó de su asiento intentando ver a través de la puerta.
-¡Callaos y sentaros todos!- gritó la profesora.
-¿Puede salir un momento Noelia?- al decir mi nombre el jefe de estudios me miró sonriente.
Yo miré a mi profesora suplicante. Ella aceptó. Me levanté corriendo y salté encima de los tres chicos dándoles un gran abrazo. El jefe de estudios cerró la puerta y se volvieron a escuchar gritos.
Yo me llevaba bien con todos mis compañeros pero eran eso, simplemente compañeros y todo eso les pilló por sorpresa. Me encantaba dejar a la gente flipada de esa manera.
-¡Os he echado de menos! ¡Ya empezaba a pensar que no vendríais!- les dije mientras Zayn y yo hacíamos nuestro famoso saludo.
-Es que hemos estado haciendo un nuevo single, lo siento- me dijo Louis mientras me tocaba el pelo.
-¡Quiero escucharlo!- grité emocionada.
-No grite señorita. Vayamos al despacho, el director nos espera.-dijo el jefe de estudios.
-La que habéis montado chicos.- dije sonriente.-Por cierto, ¿dónde está Niall?- la curiosidad me estaba matando.
-Niall y LIAM, están hablando con el director- dijo Louis mirándome y recalcando Liam- ahora verás a tu rubito tranquila.- me susurró.
Me quedé sorprendida por lo que me había dicho Louis aunque no por mucho tiempo ya que en seguida estábamos frente a la puerta del despacho, la abrí y el director me ordenó que pasara.
Ahí estaba él, sentado en uno de los sillones. Se dio la vuelta y en cuanto me vio se levanto de un salto. Le había crecido el pelo y ahora lo peinaba hacia arriba, sus ojos resplandecían más que nunca y su boca me ofrecía una sonrisa espectacular. Liam vino y me dio un abrazo. Me acerqué a Niall.
-Hola- le sonreí
-He echado de menos tus apretones de mano pequeña
-¿Pequeña? ¿Pequeño serás tú?- le dije dándole un pequeño golpe en el hombro. Los dos reímos.
-Venga Noelia, que tenemos trabajo, ¿estás preparada?- me dijo Liam abriendo la puerta.  Asentí.
-Gracias Sr. Director- dijeron al unísono. Rieron por la complementariedad.
-¿A que son graciosísimos?- le dije al director mientras salía por la puerta.

domingo, 26 de febrero de 2012

3. You spin me out of control

Abrí los ojos, me estiré entre las sabanas de mi cama. Cogí el móvil, intuía que era tarde pero tenía la curiosidad de mirar la hora, pulsé el botón central.
Me levanté de un salto lo que causó que me mareara ligeramente, volví a mirar la pantalla del teléfono: 7 llamadas perdidas y un mensaje de texto, las llamadas provenían de un número oculto al igual que el mensaje, decidí abrirlo:
Dos opciones: o te has quedado totalmente dormida o que no quieres volver a vernos, se que podemos llegar a ser pesados… te he hecho siete llamadas espero que la causa de no cogérmelo sea la primera. He pensado vernos esta tarde, pasaremos a por ti a las seis. Dile a Celia que también venga. No me cansaré hasta que esa voz sea conocida.
Liam Payne xX
Bajé al salón donde Celia ya estaba levantada, la enseñé el mensaje confusa, no entendía nada. Ella lo miró asombrada.
-¿Quién es Liam Payne?
-¡El de One Direction Noelia! ¿Qué has hecho?- dijo Celia entre gritos.
-Yo, no se…-intenté recordar-¡oh, ya me acuerdo! Anoche…
Al decir esto Celia hizo memoria y se acordó.
-Pensé que no lo decía en serio- dije asombrada.
-¡Ni yo! ¡Cómo te quiero!- dijo Celia dándome un gran abrazo.
Pasamos lo que quedaba de mañana nerviosas, yo no sabía que canción cantar a esos cinco chicos que se dedicaban a la música, todavía no me creía que hubiese impresionado a uno de ellos, era todo surrealista. Además, estaría el rubio de ojos azules mirándome, ¿podría mantener la tranquilidad mientras él estuviese delante de mí? No sé qué pasaba con ese irlandés, desde la otra noche hacía estremecerme cada vez que lo veía en frente de la pantalla del ordenador.
Llegó la hora, eran las seis en punto. Celia y yo estábamos sentadas en el sillón mirando al televisor apagado, estábamos demasiado nerviosas para hablar y hacer nada. Llamaron al timbre. Eran ellos.
Abrí la puerta decidida. El primero que apareció ante mí fue Liam, le saludé explicándole porque había pasado de él esa mañana, después vino Zayn y me chocó la mano sacándome la lengua, parecía que ya teníamos saludo, Louis vino después, me cogió colocándome en su hombro gritándome que era una dormilona y me tiró al sillón. Celia se encargó de recibir y hacer pasar a los demás.

Niall's points of view:
Estábamos sentados en el salón. Zayn y Louis tenían una cerveza en la mano mientras que Harry y Liam tomaban una coca-cola junto con Noelia al contrario que Celia y yo que no tomábamos nada. Me armé de valor y le pregunté a Noelia sobre sus otras amigas ya que, allí no estaban, quería entablar una conversación con ella. Noelia me miró sonriente y me dijo que se habían vuelto a España ese mismo día, seguidamente Louis la cogió de los hombros haciéndola cosquillas. Louis no dejaba de jugar con ella, si no fuese porque tiene a Eleanor, su novia, me hubiese puesto verdaderamente celoso en ese momento.
Liam nos había dicho por lo que estábamos allí y me moría de ganas por escucharla, la pasada noche no la oí bien.
Al cabo de un par de horas Celia ya se había soltado un poco y Noelia no paraba de hablar divertida lo que hacía que yo me volviese más loco aún. Al fin Liam decidido le pidió a Noelia que nos mostrase su talento.
-Quiero que sepáis los cinco que no quiero risas ni burlas, vosotros me lo habéis pedido y lo haré pero tened en cuenta que nunca he ido a clases ni he intentado mejorar mi voz-dijo la chica mientras se levantaba señalándonos uno a uno.
-No nos burlaremos, tranquila- dijo Harry sonriente.
-Está bien. Voy a cantar Dominode Jessie J. Allá voy- dijo Noelia resoplando.
Empezó a cantar, I'm feeling sexy and free, de la manera en que había entonado free acabó conmigo, definitivamente esa chica me gustaba. No podía parar de mirar sus movimientos, la manera que movía sus caderas al ritmo de su boca, sus manos de vez en cuando acompasaban la música, la salía solo, no lo hacía aposta.
-Bueno ya.- dijo en mitad de la canción, un velo rojizo que ella intentaba ocultar cubría su cara. Todos empezaron a aplaudir.
-¡Veis! ¡Hay que hacer algo con esa voz!- dijo Liam.

Noelia's points of view:
No me lo podía creer, los chicos de una famosa banda de música me estaban aplaudiendo por cantar. Era una situación surrealista.
-Definitivamente hay que hacer algo- dijo Harry.
-Pero es tan difícil que nosotros podamos meterla en alguna discográfica porque si…- dijo Zayn con fastidio.
-Podríamos presentarla en alguno de nuestros conciertos- dijo Louis
-No, eso es imposible. Esta todo programado, no nos dejarían- dijo Liam pensativo.
-¡Eh!, que estoy delante de vosotros-. Estaban planeando mi futuro como si no estuviese delante.
-Es que ¡eres genial Noe! Y no sabemos qué hacer- dijo Zayn.
-¿Noe?- reí.
-Chicos, dentro de dos meses son las audiciones para x Factor- Era la primera vez que Niall hablaba.
-¡Es verdad! ¡Ya lo tenemos!- dijo Harry saltando.
-Eh, un momento señor saltarín, ¿soy española recordáis? Además tan solo tengo diecisiete años, tendría que ensayar demasiado y tengo que estudiar. No me daría tiempo.
Todos se miraron.
-No te preocupes por lo de que seas española, eres buena hablando en inglés y con eso bastaría, respecto a la edad ¡Harry tenia dieciséis cuando lo hizo! Y lo de los estudios no te preocupes, nosotros tenemos ahora varios meses sin trabajo podríamos ir a tu país y ser nosotros quien te ayudásemos a mejorar. Acepta, por favor- me dijo Liam suplicante.
Necesitaba pensar. Todo era demasiado para mí. Quedaríamos al día siguiente para que les diese una respuesta definitiva.
Les acompañe a la salida del apartamento. Cuando todos se dirigían al coche Niall les dijo que le esperasen, quería hablar conmigo.
-Noelia, o Noe- los dos reímos. Me cogió de la mano.- no dejes escapar esta oportunidad, tienes talento y mucho. Me gustaría ayudarte.-
Le miré directamente a los ojos, unos ojos azules cristalinos que me hipnotizaban, me quedé sin palabras.
-Entonces, ¿te dejarás ayudar por lo menos los días que estés aquí, en Belfast, por este pequeño rubio irlandés?
Asentí tragando saliva. Me soltó la mano. Se iba.
-Niall- lo llamé- ¿te veo mañana?-
Él asintió.
Cuando entré en la casa, me quedé como una estúpida paralizada en la puerta, sumida en mis pensamientos. ¿Qué me estaba pasando?  

viernes, 24 de febrero de 2012

2. Not deny the obvious

Miraba el reloj sorprendida de la hora que era, eran las dos de la tarde. Yo no suelo levantarme tarde es más, siempre suelo ser la madrugadora y la que prepara el desayuno a todos.
Me levanté pesarosa y me dirigí hacia la cocina del apartamento donde nos alojábamos mis amigas y yo durante una semana en Belfast.
En la cocina, Celia estaba cocinando algo mientras que sus primas más pequeñas perdían neuronas en frente del televisor viendo programas del corazón.
-Buenos días chicas- saludé al entrar en la cocina.
-¡Dormilona!- me dijo Celia dándome un gran abrazo.
-Nunca me había despertado tan tarde, ¿no es cierto?- dije mientras me sentaba en una silla.
-Sí, me has sorprendido. Ayer estabas derrotada cuando llegamos a casa. Gracias Noelia.
-Te lo prometí ¿no?, ¡pues no hay gracias que valgan! Por cierto Celia, ¿Qué vamos hacer esta noche?
Miré a Sara y a Laura, esa noche se celebraba una gran fiesta en uno de los locales cercanos al apartamento pero, mis pequeñas amigas no podían entrar debido a su corta edad. Yo me moría de ganas por ir a esa y fiesta y conocer gente y a Celia también se la veía bastante interesada en ello. Decidimos hablar con las chicas. No nos costó mucho convencerlas, ellas eran bastante maduras para su edad, nada mas contarles el problema nos prometieron que ellas se las apañarían bien solas y que fuésemos a esa fiesta sin preocuparnos por nada.
Celia y yo terminamos de hacer la comida, comimos todas juntas y pasamos la tarde viendo películas. Cuando nos dimos cuenta se nos había hecho un poco tarde asique Celia y yo fuimos a prepararnos para la noche.
Había decidido ponerme mi vestido negro ceñido en la cintura y mis zapatos de tacón negros,  juego con el vestido. Un pequeño lazo en el lado izquierdo de mi cabeza hacia que mi melena rizada y rubia cayese sobre mis hombros (ver ropa personajes).
Salí de la habitación. Me encontré con Celia mirándose al espejo. Estaba verdaderamente preciosa, llevaba una falda roja  que contrastaba con su pelo negro azabache, encima de una camiseta estrecha que mostraba su espalda. Su pelo ligeramente ondulado caía sobre su espalda desnuda. (ver ropa personajes)
Tras despedirnos de Sara y Laura nos encaminamos hacia la fiesta. La noche marchó bien, estuvimos bailando y cantando,  conocimos a unos chicos bastante agradables con los que intercambiamos los números de teléfono. Al terminar la fiesta Celia y yo nos encontrábamos ligeramente mareadas debido al vodka con granadina que nos habíamos tomado repetidas veces, aún así camino a casa no dejábamos de reír y bailar.
Nos encontrábamos en frente de la puerta de nuestro apartamento buscando las llaves para poder entrar, habíamos decidido enterrarlas en la maceta que había al lado de la puerta para así no despertar a las chicas ni tener que ir cargadas con ellas, pero, debido a nuestro estado de embriaguez no las encontrábamos. Nos tiramos media hora buscándolas sin resultado, cansada y sin dejar de reírme me senté apoyando mi espalda en la pared y cruzando mis piernas. Empecé a cantar: I wanna stay Up all night, and jump around until we see the sun
-Eh- me espetó Celia sin dejar de reír
-¡No sería normal que no me la supiese después de escucharla una y otra vez, pesada!- dije a base de carcajadas- Además va genial con la situación.
Seguí cantando: I wanna stay Up all night…En ese momento unas voces me interrumpieron cantando por mí: and find I girl and tell her she’s the one
Me di la vuelta confundida y vi a los cinco chicos que había conocido la noche anterior.

Niall's points of view:
Era ella, la chica que me había quitado el sueño esa misma noche. No la conocía pero sabía que era especial, tenía algo que me llamaba la atención, puede que fuese ese pelo rizado y rubio que la llegaba hasta la cintura, ese carácter de dura pero que a la vez se la veía que era bastante sensible, esos ojos verdes que hipnotizaban o esos labios carnosos que constantemente los tenia humedecidos.
Parecía aturdida después de vernos. Se levantó y se acercó a nosotros.
-¿Chicos? ¿Sois vosotros? ¿Los de ayer?- dijo seriamente.
-Sí-  se adelantó Harry ofreciéndola un abrazo que ella no rechazó.
-Eh, compañera de camiseta- dijo Zayn acercándose a ella.
-¡Hola!- exclamó ella mientras los dos chocaban las manos.
Divertida se acercó a mí.
-Hola rubio- dijo mientras me despeinaba con una sonrisa maravillosa.
Ella no dejaba de reír, se notaba que había bebido un poco. Nos contaron lo que había pasado con sus llaves, Celia tampoco dejaba de reír, nos costaron diez minutos para poder entender lo que decían entre risas hasta que por fin Liam las encontró.
Nos despedimos de ellas mientras entraban en la casa. Yo me dirigía al coche pesaroso, creyendo que nunca podría volverla a ver. Ninguno de los chicos sabía lo que me ocurría y yo no recogía el suficiente valor para decirla de volvernos a ver. Olvidarla sería lo mejor, no me costaría demasiado, solo la había visto un par de veces.
Antes de montarse en el coche Liam salió corriendo hacia ellas. ¿Qué estaba ocurriendo?

Noelia's points of view:
Liam vino corriendo hacia mí. Yo me asusté no sabía lo que ocurría.
-¡Espera, no cierres!- nos gritó Liam.
-¿Qué ocurre?- dijo Celia
-Noelia, te he oído cantar. Eres buena.
-¡Pero si solo he cantado una frase!- dije riéndome y mirando a Celia. Ella no reía.
-Pero con esa frase he podido saber cómo es tu voz- dijo Liam con la respiración entrecortada.
-Noelia, Liam tiene razón, tienes una gran voz aunque no lo admitas, no es broma.- dijo Celia sonriente.
-¿Quedamos mañana que estarás en mejores condiciones y me muestras lo que sabes hacer?- dijo Liam.
-Bueno vale, lo que quieras. Dame tu número y te llamo.- dije seriamente.
-No puedo, entiéndeme. Dame el tuyo y te llamo yo, te lo prometo.

miércoles, 22 de febrero de 2012

1. There's a fire starting in my heart

Movía la pierna con nerviosismo. Tenía muchas cosas buenas pero paciencia, lo que se dice paciencia es lo que me faltaba y, en ese momento era esencial no carecer de ella. Eran ya las dos y media de la madrugada y tras un concierto de dos horas estaba agotada, pero no podía dejar a las chicas solas, se lo había prometido. El concierto había terminado a las doce pero nosotras estábamos en la puerta por donde los chicos tendrían que salir, algún día. Había prometido a mi mejor amiga Celia y a sus primas que el día que tuviesen la oportunidad de ir a ver en concierto a los chicos de One Direction (el grupo favorito de ellas) las acompañaría y les conoceríamos en persona. A mí personalmente, me gusta más el rock sí, me llamarás extraña pero soy así, no puedo evitarlo pero no puedo negar que aquellos chicos eran bastante guapos y para mi sorpresa en esa noche había podido comprobar que no solo era físico, lo que tienen esos muchachos es una gran voz.
Estaba cansadísima, yo no suelo fumar pero no podía más, metí la mano en el gran bolso negro que había elegido llevarme esa noche puesto que, mi propósito era sacar buenas fotografías de los chicos (una de mis pasiones es la fotografía) y saqué un cigarrillo del único paquete que compré en la última fiesta.
-¿Qué haces Noelia?- Celia ya estaba reprochándome.
-Déjame, estoy estresada y todo por vuestra culpa- dije mientras encendía el cigarrillo, volví la cabeza hacia atrás apoyándome más en la pared donde estaba sentada cruzada de piernas dando mi primera calada.
-Lo siento pero…- Sara volvió la cabeza y se quedó blanca.
-Ahí están- me murmuró Celia.
Giré la cabeza y ahí estaban. Un chico con el pelo lacio peinado hacia arriba bailaba divertido mirando a sus compañeros andando hacia atrás, llevaba unos pantalones que le llegaban hasta los tobillos y una camiseta azul marino con un estampados de rayas marrones, a él le seguía otro chico, una mata de pelo rizado le reía las gracias que su amigo le proporcionaba, ese chico se llamaba Harry, era del único que recordaba el nombre puesto que, la prima de Celia no dejaba de mencionármelo. Detrás unos ojos marrones brillantes conjuntados con una sonrisa fascinante vestía una camiseta de Guns N’ Roses negra, ¡esa era mi camiseta! (ver ropa personajes) la que había elegido ponerme para el concierto, simple casualidad pensé. Esos ojos marrones le sonreían a un chico con una camisa a cuadros rojos y azules, unos pantalones color beige y unas convers blancas, detrás el rubio irlandés de la banda (sabía que era irlandés porque Celia me lo había explicado en la cola del concierto) corría hacia los demás chicos, parecía rezagado.
Para mi sorpresa, mis amigas se habían quedado paralizadas, no dejaban de mirarlos pero no reaccionaban.
-Oye chicas, yo no he estado esperando dos horas y media aquí para nada. ¡Id y pedidles una foto!- dije reincorporándome.
Ellas seguían paradas. Me estaba poniendo nerviosa, ellos estaban a punto de montarse en el coche y nosotras sin hacer nada. Decidí gritar lo único que sabía sobre esos chicos:
-¡Harry! ¡Harry!- yo gritaba pero Harry ya se había metido en el gran coche que les esperaba y no me oía. Yo no sabía qué hacer, no quería que mi mejor amiga se quedase sin cumplir uno de sus grandes sueños solo por un estúpido ataque de nervios.
-Irish boy, ¡Irish boy! Por favor, ¿puedes oírme?- dije con el mejor acento inglés que pude.
El rubio irlandés se dio la vuelta y vino hacia nosotras.
-Se llama Niall- me susurró Laura, la prima de Celia sin que el chico nos oyese. Niall se acercó.
-Hola Niall, me llamo Noelia- dije dándole dos besos- Habéis estado increíbles esta noche, ¿podría pedirte un favor? A mis amigas les encantaría hacerse una foto contigo y los demás chicos.
-Claro, no te preocupes. Entrad. ¿Sois españolas? Lo noto en el acento- dijo Niall con una amplia sonrisa en la cara mientras abría la verja que nos había impedido acercarnos más a ellos.
-¡Sí!, ¡Vamos chicas!- dije cogiendo a Celia de la mano. Admito que yo también estaba bastante emocionada con todo este asunto.
Niall nos condujo hasta el coche donde le esperaban los demás. Entró en el vehículo y pude escuchar cómo les pedía a sus compañeros que saliesen para hacer un favor a unas maravillosas fans. Tengo que hacer mención a nuestro nivel de inglés, es bastante bueno, sin él creo que no hubiésemos podido hacer mucho.
Harry salió el primero, detrás iba el chico de la camisa a cuadros y, antes de que saliese el muchacho que llevaba mi camiseta salió el del estampado a rayas.
-Celia, ayúdame. ¿Cómo se llaman?- pregunté preocupada para no tener una situación incómoda.
-En orden a como han salido; Harry, Liam, Louis y Zayn.
-¡Anda, si sabes hablar!- Celia me dio un codazo avergonzada por su reacción anterior.
Los chicos se acercaron. Fui saludando uno a uno orgullosa de ir recordando todos y cada uno de los nombres, hasta que llegué al de la mirada penetrante.
-Hola, eem…, chico, ¡llevas mi camiseta!- era completamente absurdo lo que dije pero no me acordaba de su nombre, estúpida memoria.
-¡Es verdad!- dijo el chico chocándome la mano y sacando la lengua.
-¡Zayn!, eres ¡Zayn!- grité avergonzada.
-Sí, ese soy yo- dijo riéndose.
Después de las presentaciones cada chico se hizo una foto a solas con cada una de nosotras y finalmente una todos juntos.
Llegó la hora de marcharse, nos despedimos y nosotras vimos como se iban en el coche.
Mis amigas tenían razón, eran unos chicos estupendos y tenían una gran voz.